El Ministro de
Educación Iñigo Méndez de Vigo considera que, a pesar de todo lo que está
suponiendo para España el desafío secesionista, no es necesario que el Estado
recupere las competencias educativas. Por desgracia para nuestro país, los representantes
de los partidos del Régimen de 1978 no están por la labor de revertir el
proceso que nos ha traído a la crisis actual. Durante cuarenta años se ha
permitido a los secesionistas, cada vez en mayor medida, difundir su rechazo al
proyecto nacional de España por medio de los centros educativos bajo control
autonómico. Mientras que en Cataluña y Vascongadas se ha fomentado abiertamente
el odio a España, haciendo la vista gorda tanto gobiernos socialistas como
populares, en otras regiones se ha apostado por la indiferencia hacia cualquier
arraigo por lo español. El sistema educativo del Régimen de 1978 ha sido un
fracaso absoluto y sin semejante error no puede comprenderse cómo y por qué
España sufre semejante amenaza secesionista.
El Ministro de
Educación se equivoca, igual que el resto del Gobierno. A los secesionistas no
se les derrotará supervisando sus instituciones y obligándoles a acatar la
legislación. Al secesionismo sólo se le puede derrotar ofreciendo al pueblo
español un proyecto nacional que ofrezca justicia social auténtica y que no dé
cabida a los partidarios de la ruptura. Como falangistas, desde el Frente de
Estudiantes Sindicalistas proponemos y llamamos a los jóvenes a luchar por un
modelo educativo público y de calidad que no excluya a nadie por razones
económicas y que instruya en valores sanos en todo el territorio nacional. Va
siendo hora de acabar con las mamandurrias y los nefastos planes educativos que
conllevan diversidad de contenidos en función del territorio donde se eduque el
alumno.
Hay que
recuperar la competencia educativa para el Estado, sin duda. Pero mientras
gobiernen Partido Popular o Partido Socialista, sin olvidar a las falsas
alternativas de Ciudadanos o Podemos, está claro que el problema no
desaparecerá porque lo único que entienden estos partidos por España es una
Carta Magna revisable en muchísimos sentidos (y muy pocos a favor del proyecto
nacional de España, tal y como comprobamos a menudo en sus declaraciones).
Ayúdanos a
construir el movimiento nacional y revolucionario que España necesita para
superar la crisis secesionista. Ayúdanos a ofrecer a los estudiantes una voz en
beneficio de sus derechos y su futuro. ¡El Frente de Estudiantes Sindicalistas
cuenta contigo!